lunes, 6 de septiembre de 2010

DIOS, EL SEXO, LA POESÍA con la pesadilla de Henry Fuseli



Soy dios
cuando me tocas despacio
y más que dios
cuando me corro dentro,
de ahí solo resta volver
a la condición humana
y lo único parecido
a toda aquella divinidad
son los versos.