domingo, 7 de febrero de 2010

 DE LA PROHIBICIÓN DEL ARTE



desenterremos el arte de las galerías, no es tierra, no hay sustrato en los muros donde cuelgan los cadáveres, putrefacción como principio de vida y otra vez el olvido de la vida en las freidurías del puerto, en las calles empinadas, voceada como antiguamente los periódicos, destruyamos el arte erróneo concepto, no fueron las cuevas espacios expositivos si no viviendas donde aquella invocación fue solo quizá decoración y ni siquiera la decoración estaba inventada, dejemos de llamar arte a los delirios comunes de la masa, a la masturbación, al malentendido amor solo baba sobre baba, asi dejando de llamarlo con ese nombre que recuerda a la mentira será el arte respuesta, fluida sonrisa, canción engarzada en el blanco humo de la marihuana, prohibamos el arte para que a la contra se regenere el arte y no muera.